PLAN DE CONTIGENCIA: “RECOMENDACIONES PARA IR A TRABAJAR A PARTIR DEL LUNES 13 DE ABRIL”
Seguimos en un estado de alarma por el Covid-19 y, en este escenario, los empresarios deben planificar una vuelta al trabajo segura para sus trabajadores, pero también para frenar la propagación del virus.
Se debe planificar cómo la infección puede afectar a la empresa, su proceso productivo y, además, debemos estar atentos a las necesidades cambiantes que las administraciones sanitarias y laborales establezcan en función de los avances del conocimiento sobre el virus y la enfermedad.
Estas son las principales medidas preventivas que se pueden adoptar en el centro y los puestos de trabajo para hacerlos más seguros frente a COVID-19:
- Teletrabajo. Es la medida más segura, establecer sistemas de trabajo a distancia siempre que sea posible. Mantener y ampliar en la medida de lo posible esta modalidad de trabajo.
- Organización del trabajo y horarios. Establecer horarios y turnos especiales para reducir el número de trabajadores presentes, al mismo tiempo, en los lugares de trabajo. Flexibilizar horarios para evitar aglomeraciones de personas en las entradas y salidas.
- Cómo desplazarse al centro. Fomentar los viajes en coche en solitario o en transporte que permita la distancia de seguridad.
- Proveedores y otros. Coordinarse con Contratas y ETT´s en cuanto a las medidas adoptadas y evaluación del riesgo del personal afectado. Reducir visitas y reuniones presenciales.
- Ventilación del local. Aumentar las tasas de ventilación, aumente el porcentaje de aire exterior que circula en el sistema.
- Distancias de seguridad. La distancia de seguridad establecida es de 2 metros. Analizar la distribución y organización de los puestos de trabajo para garantizar la distancia de seguridad. Minimizar contacto entre las personas trabajadoras y/o clientes y analizar aquellas tareas en las que no se puede respetar la distancia y buscar soluciones (barreras, EPIs…). Fomentar la ubicación fija de los trabajadores, sin rotar en equipos o ciclos de trabajo.
- Espacios comunes o concurridos. Evitar concurrencia en espacios comunes:
- Limitar el uso de vestuarios y servicios higiénicos.
- Racionalizar el uso de ascensores.
- Limitar el uso de comedores siempre que sea posible, limitando al máximo la manipulación y consumo de alimentos en los centros de trabajo.
- Eliminar o reducir reuniones, visitas y viajes no esenciales.
- Limpieza de superficies y espacios. Incrementar la limpieza y desinfección de aquellas superficies que se tocan con frecuencia en el lugar de trabajo: pupitres de mando, teclados, mesas, interruptores, pasamanos en escaleras, manillas, grifos, etc, realizándola varias veces en cada jornada laboral y en los cambios de turno.
- Medios de higiene. Garantizar la disponibilidad y fácil acceso a agua y jabón para la higiene de manos, papel desechable para secado y papeleras, preferentemente con apertura de pedal. En los puestos en que no sea posible, disponer de geles alcohólicos.
- Equipos de Protección Individual (EPI). Seguir empleando los equipos necesarios para el desarrollo del trabajo habitual. Estar atentos a las recomendaciones de las autoridades sanitarias sobre el uso de mascarillas o tapa bocas y guantes.
Comunicación, formación, información y sensibilización. En esta situación es fundamental para las personas, conocer cómo proceder, cómo actuar, cuáles son los cambios en los procedimientos, qué no hacer, etc. Se debe formar e informar sobre las medidas de prevención específicas relacionadas con COVID-19. Recordar la necesidad de reducir al máximo el contacto manos/cara y de lavarse frecuentemente las manos. Informar y recordar instrucciones para lavarse las manos adecuadamente. Difundir las recomendaciones para prevenir el coronavirus.
Por eso es de suma importancia que la vuelta al trabajo cuente con la elaboración y mantenimiento de un Plan de Contingencia adaptado a las características de cada centro de trabajo y dirigido a la prevención y respuesta ante la eventual aparición de casos o contactos estrechos de COVID-19 según los diferentes niveles de riesgo obtenidos de la evaluación de riesgos específica, con medidas preventivas jerarquizadas:
1- Medidas de tipo organizativo
2- Medidas higiénicas
3- De protección colectiva
4- De protección individual
5- Formación e información
Aunque la empresa es la responsable de la seguridad y la salud de las personas trabajadoras respecto de los riesgos que puedan tener en el trabajo, desde PREVILABOR como su servicio de prevención les ofrecemos nuestro asesoramiento y apoyo técnico para evaluar y definir su PLAN DE CONTINGENCIA PARTICULAR, y poner así en marcha las medidas necesarias para poder continuar trabajando con las mayores condiciones de seguridad.